Una interpretación fresca y suave inspirada por una flor que se desarrolla en el rocío de la mañana. Una nueva faceta de la feminidad explorada por el Perfumista Guerlain.
"Para esta composición, queríamos centrarnos en el aspecto floral y lo hemos diseñado como un ramo de flores blancas, intensificando el jazmín Sambac, que es una parte integral de la identidad de Mon Guerlain", explica Delphine Jelk, que co-creó el perfume con el maestro perfumista Thierry Wasser.
"La faceta soleada, luminosa y generosa de la feminidad se expresa a través de la sobredosis de jazmín, al igual que mi colega Delphine", agrega Thierry Wasser
JAZMÍN LUMINOSO
Esta excepcional materia prima utilizada en grandes cantidades, el jazmín sambac aporta toda su feminidad luminosa a la composición, pues está presente en sobredosis. Gracias a este jazmín de singular calidad y al talento del perfumista, que lo ha asociado con las demás flores, la fragancia se revela solar, realizada, radiante. Como la mujer radiante y realizada que cree en sus sueños.
PEONIA
Esta flor de apariencia tan explosiva con un perfume tan sutil, parece expresar las contradicciones del alma femenina, evocando la complejidad de sus emociones o sentimientos… De hecho, se dice “sonrojarse como una peonía” … Es originaria de China. Marco Polo la evocaba ya en sus relatos. Su aroma floral y tierno se parece al perfume de la rosa, pero con aromas verdes y vegetales como el rocío o el lirio de los valles. La peonía es una flor que no libera su perfume. El perfumista debe, por tanto, reconstituir su aroma, que le aporta una imagen de dulzura y feminidad a la composición.
Esta botella cuadrilobé diseñada por Gabriel Guerlain fue creada por la casa de Baccarat en 1908. Ha tenido fragancias legendarias y con los años se ha establecido como una de las botellas icónicas de Guerlain, inspirando a una serie de artistas y diseñadores que lo han reinterpretado a través de sus creaciones. Combinando contrastes expresados por la fuerza de las líneas tensas y la sensualidadde las curvas, evoca una feminidad fuerte, libre y sensual. Simplificado, gráfico y sobrio, está inspirado en la botella de un alquimista y debe su nombre "quadrilobé" a su tapón tallado en un bloque sólido para obtener una forma de cuatro lóbulos.
