Desde el primer momento de su creación, Sauvage llegó como una fuerza de la naturaleza. Su potente frescura conquisto el mundo a la velocidad de la luz como un maremoto. Hoy explora un nuevo territorio en la mágica hora del crepúsculo, el mismo momento en que todo cambia.
Al suspenderse el tiempo en un atardecer azul efímero, este nuevo Sauvage hace su aparición. En un paréntesis habitado por ancestrales leyendas donde los lobos son dioses y los hombres dejan que sus instintos animales hablen. El aire fresco de la noche despierta los aromas de la tierra. La naturaleza se revela, intensa y fragante, liberando sus aromas profundos resinosos y picantes.
Es un Eau de Parfum de acordes sensuales que encarnan la magia de este tiempo de suspendido cuando todo se calma y cuando el cielo ardiente invita sublimemente.
Sauvage muestra instantáneamente sus colores, pero no es desconcertante, con nuevas notas picantes que proporcionan calor y redondez. La Pimienta de Sichuan y los granos de Pimienta Rosa todavía están presentes, mientras que el Anís de Estrella en su forma más expresiva atraviesa el paisaje. De la misma manera, la Nuez Moscada de Indonesia agrega nuevas facetas a estas especias calientes. Refinado y algo feroz, adquiere un carácter almizclado sublime, que acompaña a todas las otras materias primas de esta composición perfectamente pensada para largo recorrido.
Mientras tanto, una potente nota de Ambroxan establece su fuerza ámbar, aunque dominante, conserva su territorio con una nota resinosa de Lábdano, que domina su fuerza animal y añade un toque de cuero con sus aspectos vegetales matizados.
Aparece un suntuoso nuevo invitado con la forma de Vainilla de Papua, que despliega su irresistible atractivo gourmand con toques ahumados que lo hacen viril. Recolectada en verde y luego picada en agua caliente, esta vainilla excepcional (originalmente una variedad tahitiana) se trata utilizando un método de extracción de CO2 libre de solventes que recrea la compleja resistencia de sus aromas mientras protege el medio ambiente. Contra un telón de fondo de madera en el que Vetiver está muy acentuado, difunde su exotismo icónico dando acentos orientales Sauvage.
